Los juguetes que traen los niños a clase tras las vacaciones nos sirven para realizar distintas actividades
Cuentan de forma individual cómo es el juguete, forma, composición, funcionamiento...
Tras una breve explicación oral, tienen que clasificarlo en algún grupo. No se les dice dónde, ellos solos tienen que pensar qué atributo tiene su juguete que los lleva a clasificar en uno u otro conjunto.
Atienden en su mayoría a la forma del juguete para su clasificación, se les permite volver y cambiar si creen que no lo han hecho de la forma adecuada.
Si observamos que al final del juego hay algún juguete fuera del lugar que de forma lógica no esta en su lugar les preguntamos el motivo. Comentan que lo han colocado ahí porque el de su amigo más querido está en ese lugar y quieren que esté muy cerquita. El lado afectivo de las relaciones está muy presente en todas las actividades que realizamos; fomentamos que sea así favoreciendo relaciones auténticas de amistad.
En clase los Reyes Magos les trajeron unos cajones de arena. Les ha gustado tanto que vamos a tener que pedir alguna más.
La arena dentro de clase es un elemento natural muy estimulante para ellos.
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